LO HARAS OTRA VEZ

La Biblia nos asegura que “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos” (Heb.13:8 RV60), con la misma capacidad y disposición de siempre para sanar, rescatar, hacer milagros y perdonar.

“Lo harás otra vez” es una declaración de fe, de que todo nuestro ser todavía confía en él, y que aún cuando no vemos lo deseado “en la natural”, ya lo vemos con nuestros ojos espirituales. ¡Es una gran frase! ¡Es una gran declaración!

  • Como creyentes, apunta hacia la promesas que esperamos personalmente y para los que amamos, esa salud, esa provisión, esa resolución del conflicto que se ha estado viviendo, esa restauración de relaciones, ese llamado resucitado.
  • Como iglesia, apunta hacia el Pentecostés en el Libro de Los Hechos, a anhelar ser la Iglesia Primitiva del principio, donde los cristianos se amaban entrañablemente, y sus obras eran pruebas visibles y tangibles del poder del Espíritu Santo que traían liberación y sanidad.
  • Como familias, apunta a lo que ya anhelamos tanto y que tanto necesitamos para renovar nuestro corazón… un “tiempo propicio” en familia.

Todos necesitamos que ciertas cosas regresen a nosotros, que nos sean devueltas, que las volvamos a vivir y disfrutar… sea nuestro primer amor, la pasión por vivir, o la bendición y la paz, algunas de ellas cosas que nosotros descuidamos y que dejamos ir.

Ahora es el tiempo profético de recuperarlas. ¡Debemos confiar que Dios contestará oraciones, y podemos depender de Aquel cuyos atributos son la fidelidad, la inmutabilidad, la eternidad… y cuyo amor y carácter nunca cambian.

Todos necesitamos que ciertas cosas regresen a nosotros, que nos sean devueltas, que las volvamos a vivir y disfrutar… sea nuestro primer amor, la pasión por vivir, o la bendición y la paz, algunas de ellas cosas que nosotros descuidamos y que dejamos ir.

Ahora es el tiempo profético de recuperarlas. ¡Debemos confiar que Dios contestará oraciones, y podemos depender de Aquel cuyos atributos son la fidelidad, la inmutabilidad, la eternidad… y cuyo amor y carácter nunca cambian.

¡Escucha! No hay nada bueno que Dios haya hecho en pasado que no desee hacer en el presente. Las grandes obras de Dios en el pasado no se supone que quedaran registradas en la Biblia como simples relatos en un libro, sino para que las experimentemos en nuestras vidas.

La oración de siempre debe ser: “¡Señor, haz que cambie de nuevo nuestra suerte, como cambia el desierto con las lluvias!” (Sal.126:4 DDH). El Dios que abrió el Mar Rojo en el desierto aún puede mover montañas para mostrarnos su favor.

Digamos juntos: ¡Sé que lo harás otra vez!

Se trata de:

  • QUERER
  • CREER
  • CRECER

¡Mira lo que nos dice la Biblia!

“He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad” (Is.43:19).

ARIEL ROMERO LOPEZ

(C) 2021

31 VERSICULOS BIBLICOS ACERCA DE LA RESTAURACION:

  • Jl.2:25-26
  • Jer.30:17
  • Sal.51:12
  • Is.61:7
  • Jb.42:10
  • Hch.3:19-21
  • 1 Pe.5:10
  • 1 Jn.5:4
  • Mr.11:24
  • Zac.9:12
  • Jer.29:11
  • Sal.126:4
  • Heb.13:8
  • Gal.6:1
  • Mat.6:33
  • Is.42:11,12
  • Os.6:1
  • St.5:16
  • Sal.23:1-3
  • Jn.10:10
  • Sal.71:20-21
  • Sal.51:11,12
  • II Cor.5:17,18
  • II Cr.7:14
  • Am.9:14
  • Ap.2:4,5
  • Is.55:1
  • Is.40:29-31
  • Jer.24:7
  • Rom.15:13
  • Sal.66:12

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