He aprendido muchas cosas en mis 40 años de ministerio, 28 años como Pastor y 24 años como Pastor de Pastores. Este es un breve resumen de algunas de las lecciones que he aprendido con relación a:
EDIFICANDO CARÁCTER EN LÍDERES NUEVOS
Un líder joven debe de reflejar una madurez superior a sus años si ha de ganarse el respeto de los demás.
Un líder joven debe ser paciente en el tiempo de la siembra mientras va llegando poco a poco la bendición de la cosecha de sus esfuerzos. “Irá andando y llorando el que leva la preciosa semilla, pero volverá a venir con regocijo trayendo sus gavillas”. “Hay tiempo de sembrar y tiempo de cosechar”.
Conforme se multiplica el trabajo a un líder que va creciendo es necesario trabajar más sabiamente. En vez de ir descuidando su tiempo devocional diario es necesario protegerlo por encima de todo aunque las ocupaciones se incrementen.
La mejor forma de alcanzar lo que Dios te ha hecho soñar es encontrar una persona que ya lo haya logrado, y absorber todo lo que puedas de ella para que tu camino hacia la meta sea más fácil. Esto funciona mejor si lo conoces personalmente, pero si esto no es posible, el documentarse acerca de sus logros es también excelente.
Hay 3 áreas ministeriales que debe de cubrir todo pastor: Cuidador de ovejas, predicador de la Palabra de Dios y gerente de la organización de iglesia. Todo nuevo pastor ha de esforzarse en desarrollar cada una mediante el estudio, la práctica, y la imitación positiva de otros líderes.
Hay 3 áreas personales que debe cuidar todo pastor: Su relación con Dios, su realización personal y la formación de una buena familia. Todo nuevo pastor ha de revisar esto por encima de todo esfuerzo pastoral.
Ponte a ti mismo debajo de un líder que te inspire y hereda la unción que está sobre su vida.
La sumisión a otro determina el respaldo y la autoridad que yo ejerzo.
Hay una gran diferencia entre autoridad y autorización.
En tus primeros años escucha mucho; después habla solo lo necesario.
No pierdas el tiempo enseñando a gente que no quiere aprender.
Escoge con quien convives. El mayor recurso que tienes en la vida es el tiempo, y no es renovable.
La palabra Matrimonio se escribe con mayúscula; la palabra ministerio con minúscula.
Comprométete con el proceso de tu formación, y mira cómo Dios hace el resto.
Honra a Dios y sorpréndete cómo él te honra a ti.
(2014) Ariel Romero López
Ministerio Vino y Aceite Internacional
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